USCCB President: Today’s Executive Order Begins a Process
May 4, 2017
Cardinal Daniel N. DiNardo, Archbishop of Galveston-Houston and President of the United States Conference of Catholic Bishops (USCCB), has issued a response to President Donald J. Trump’s executive order signed this morning.
Cardinal DiNardo’s full statement follows:
“Today’s Executive Order begins the process of alleviating the serious burden of the HHS mandate. We will engage with the Administration to ensure that adequate relief is provided to those with deeply held religious beliefs about some of the drugs, devices, and surgical procedures that HHS has sought to require people of faith to facilitate over the last several years. We welcome a decision to provide a broad religious exemption to the HHS mandate, but will have to review the details of any regulatory proposals.
In recent years, people of faith have experienced pressing restrictions on religious freedom from both the federal government and state governments that receive federal funding. For example, in areas as diverse as adoption, education, healthcare, and other social services, widely held moral and religious beliefs, especially regarding the protection of human life as well as preserving marriage and family, have been maligned in recent years as bigotry or hostility — and penalized accordingly. But disagreement on moral and religious issues is not discrimination; instead, it is the inevitable and desirable fruit of a free, civil society marked by genuine religious diversity.
We will continue to advocate for permanent relief from Congress on issues of critical importance to people of faith. Religious freedom is a fundamental right that should be upheld by all branches of government and not subject to political whims. As president of the Bishops’ Conference, I had the opportunity to meet with President Trump this morning in the Oval Office to address these and other topics.”
WASHINGTON—El cardenal Daniel N. DiNardo, arzobispo de Galveston-Houston y presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), ha emitido una respuesta a la orden ejecutiva del presidente Donald J. Trump firmada esta mañana.
La declaración completa del cardenal DiNardo es la siguiente:
La orden ejecutiva de hoy comienza el proceso de aliviar la seria carga del mandato del HHS. Colaboraremos con la Administración para asegurar que se proporcione un alivio adecuado a las personas con creencias religiosas profundamente arraigadas acerca de algunos de los fármacos, dispositivos y procedimientos quirúrgicos cuya facilitación el HHS ha tratado de exigir a personas de fe en los últimos años. Agradecemos la decisión de proporcionar una amplia exención religiosa al mandato del HHS, pero tendremos que revisar los detalles de las propuestas regulatorias.
En años recientes, las personas de fe han experimentado insistentes restricciones a la libertad religiosa tanto del gobierno federal como de los gobiernos estatales que reciben fondos federales. Por ejemplo, en áreas tan diversas como la adopción, la educación, la atención de salud y otros servicios sociales, creencias morales y religiosas ampliamente extendidas, especialmente en cuanto a la protección de la vida humana y la preservación del matrimonio y la familia, han sido denostadas en los últimos años como fanatismo u hostilidad, y penalizadas en consecuencia. Pero el desacuerdo sobre cuestiones morales y religiosas no es discriminación; por el contrario, es el fruto inevitable y deseable de una sociedad civil libre y marcada por una genuina diversidad religiosa.
Continuaremos abogando para que el Congreso dé un alivio permanente en cuestiones de importancia crucial para las personas de fe. La libertad religiosa es un derecho fundamental que debe ser defendido por todas las ramas del gobierno y no estar sujeto a veleidades políticas. Como presidente de la Conferencia de Obispos, tuve la oportunidad de reunirme con el presidente Trump esta mañana en la Oficina Oval para abordar este y otros temas.